La celebración en Londres de los Juegos Olímpicos 2012, no solo transformó la fisonomía del skyline londinense -que nos permiten ahora disfrutar de las mejores vistas de la ciudad desde The Shard-, además le aportó a la capital británica un protagonismo que incremento el número de turistas internacionales -cerro el año 2013 con la cifra récord de 16,8 millones de visitantes de extranjeros-, y la convirtió en la ciudad más visitada del mundo ese año.
Entre ellos, 843.000 de nuestros compatriotas la visitaron y se alojaron en los hoteles londinenses, con el tirón de los Juegos Olímpicos, y es que Londres es uno de los destinos tradicionales para los españoles -también para comprar y ver espectáculos-, lo que nos convierte en el quinto mercado emisor internacional para la ciudad, tras Estados Unidos, Francia, Alemania e Italia.
Para los que visitan Londres por primera vez, hay atracciones imprescindibles cómo:
El Palacio de Westminster
Tras su destrucción en un incendio en octubre de 1834, el Palacio de Westmister fue reconstruido en 1847, y así ha llegado hasta la actualidad. También conocido como las Casas del Parlamento, por ser la sede de las dos Cámaras que componen el Parlamento Británico. El complejo se completa con la Victoria Tower -en donde se encuentran las copias de todas las leyes del Parlamento desde 1497-, y por el famosísimo y simbólico, Big Ben, que enmarcan su hermosa fachada de estilo gótico victoriano.
El Palacio de Buckingham
La residencia oficial de la Familia Real Británica desde el año 1837, recibe el nombre del duque para el que fue construido en el año 1703. Su adquisición en 1762 por el rey Jorge III lo convirtió en la residencia privada de la primera familia británica. El palacio sobrevivió a dos guerras mundiales de forma impresionante, aunque perdió la capilla real durante un bombardeo en el año 1940.
Tower Bridge
El emblemático puente levadizo es una de las imágenes más típicas del paisaje urbano de Londres. Situado al lado de la Torre de Londres, fue construido en 1894 para unir las dos orillas del río Támesis, y permitir la extensión de la creciente ciudad de Londres, más abajo del Puente de Londres. La maquinaria hidráulica original todavía abre el puente, aunque en la actualidad utiliza aceite en lugar de agua, y las máquinas de vapor han sido reemplazadas por motores eléctricos.
Y cómo recomendaciones fuera de ruta, está la posibilidad de navegar por Regent’s Canal, una vía construida a comienzos del siglo XIX, que discurre por el centro de Londres, entre Camden Town -situado junto al mercadillo conocido cómo Camden Lock Market– y la zona conocida cómo Little Venice, en Paddington.