La inauguración ayer al público del Museo del Memorial 9/11 -un homenaje a las víctimas de los atentados del 11 de septiembre de 2001- en la zona del World Trade Center en Nueva York, es la materialización de un proyecto ambicioso y complicado -por las implicaciones afectivas del museo- que está llamado a ser una de las principales atracciones de Nueva York.
Es sólo un ejemplo, y el último en ver la luz, de los muchos proyectos a nivel mundial que esperan en la mesas de diseño de estudios de arquitectura, cómo los de Norman Foster, y su paseo elevado para bicicletas sobre Londres, denominado SkyCycle.
Otro paso elevado -éste peatonal- que podrá ser visitado en breve es la tercera y definitiva fase del High Line, también en Nueva York, que se ha convertido en uno de los proyectos de recuperación más exitosos de la ciudad, con críticas favorables unánimes y respaldo de visitantes. Pero hay muchos más, cómo Cinecittà World en Roma, o la reapertura del Museo Picasso de París. Seguir leyendo otros proyectos en Travel&Leisure.